El puente Barakaldo-Erandio no soportaría el impacto de un gran barco y protegerlo sería demasiado caro
«Se considera imposible» que la pasarela peatonal y ciclista entre Barakaldo y Erandio «sea capaz de resistir el impacto» de un gran buque —quimiquero—. La afirmación figura en el proyecto de esta infraestructura, que desestima poner «protecciones que eviten el daño de la subestructura», por sus «dimensiones y coste desorbitados». La construcción del puente ha sido adjudicada en 25,4 millones de euros.
El análisis recuerda que «que las pilas centrales de la pasarela, que son las más robustas, se sustentan sobre 4 pilotes» cuando se «necesita un mínimo de 28 pilotes, trabajando de forma conjunta», para resistir el impacto del quimiquero «sin que la pila contra la que se produjera el choque se rompiera».
El documento técnico señala que, al menos, «no hay riesgo para las vidas humanas» ya que cuando el gran barco pase por este lugar la pasarela estará «abierta y desalojada», porque, por sus dimensiones, las embarcaciones de 127 metros de eslora —largo— y 20 de manga —ancho— no podrán cruzar por la zona si el puente permanece cerrado.
El estudio del riesgo de impacto contempla las distintas posibilidades. En el caso de los remolcadores, su frecuencia es «sumamente baja»; pero debe analizarse el caso de los barcos de alta mar porque «la ría se utiliza como canal de salida al mar de buques de grandes dimensiones».
En cualquier caso, el proyecto asegura que «el puente resiste por sí mismo los impacto de los barcos pequeños, que son los que, por su nivel de circulaciones, tiene más probabilidades de impactar».
Pese a todo, los técnicos consideran que «la ejecución de una defensa no resultaría estrictamente necesaria» para este puente, si bien «puede ser de interés considerar y analizar la posibilidad de ejecutar algún tipo de defensa del puente, que, en caso de impacto de embarcaciones, pueda evitar que éste alcance al puente, o que si lo alcanza, lo haga atenuado, todo ello al objeto de alargar la vida útil de la obra».
Extractos del proyecto
El análisis del impacto debido al tráfico de barcos por la ría se lleva a cabo para tres buques tipo:
Quimiquero: 127.0 m de eslora, 20.0 m de manga, 6.5 m de calado y 11749 toneladas de desplazamiento;
Goleta Atyla: 30.0 m de eslora, 7.0 m de manga, 3.0 m de calado y 100 toneladas de desplazamiento; y
Buque Ibai Alai: 15.5 m de eslora, 5.5 m de manga, 0.7 m de calado y 30 toneladas de desplazamiento.
La energía generada por el impacto de estas embarcaciones se refleja en la siguiente tabla en función de la masa de agua desplazada y la velocidad de circulación de los mismos.
Tipos de impacto
El impacto del quimiquero, cuya navegación por la ría requiere de la apertura de la pasarela dadas sus dimensiones, necesita un mínimo de 28 pilotes, trabajando de forma conjunta, para poder ser resistido sin que la pila contra la que se produjera el choque se rompiera.
Teniendo en cuenta que las pilas centrales de la pasarela, que son las más robustas, se sustentan sobre 4 pilotes, se considera imposible que la pasarela, con el diseño actual (en términos de materiales y dimensiones) sea capaz de resistir el impacto del quimiquero, por lo que no se estima oportuno el diseño de protecciones que eviten el daño de la subestructura de la pasarela puesto que resultarían elementos estructurales de dimensiones y coste desorbitados en comparación con la propia pasarela. Es importante señalar que cuando este barco pasa, dado que la pasarela está abierta y desalojada, no hay riesgo para las vidas humanas en caso de impacto.
La goleta Atyla representa los buques que calan del orden de 3 m; buques de cierta entidad como los remolcadores. Se trata del buque más grande que puede transitar por la ría sin considerar el quimiquero. Este tipo de barcos tiene que transitar por el canal de navegación, entre las pilas centrales de la pasarela, porque correrían el riesgo de encallar si circularan por los laterales de la ría. Este es el buque tipo empleado, por tanto, en el diseño de las defensas que protegen las pilas centrales limitando el canal de navegación. Sin embargo, la frecuencia de tránsito de este buque es sumamente baja como para suponer un riesgo no admisible de colapso de la estructura, tal y como se expone en el anejo 14 de Navegabilidad y se desprende del Estudio de Viabilidad Náutica realizado por Siport21 para el Proyecto del Puente Peatonal y Ciclista entre Barakaldo y Erandio. Siendo esto así, se definen unas defensas para soportar el impacto de la goleta a sabiendas de que su construcción no es estrictamente necesaria.
El tercer barco considerado en el análisis es el Ibai Alai, representativo de los barcos pequeños, con un calado de 70 cm. Este tipo de buque puede transitar por la rivera y es susceptible de circular entre las pilas laterales de la pasarela. Es por eso que se emplea este buque para el análisis del impacto en las pilas de los tramos fijos de acceso a la estructura. Asimismo, se utiliza como referencia para evaluar el posible impacto en el tablero de un embarcación de pequeño calado.
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Según el estudio probabilístico realizado para el puente por la empresa Siport21, no es necesaria la disposición de defensas del puente. El puente resiste por si mismo los impacto de los barcos pequeños, que son los que por su nivel de circulaciones tiene más probabilidades de impactar contra el puente, siendo aceptable para el resto de las embarcaciones la probabilidad de colpaso de la estructura.
No obstante, en el proyecto se hace el dimensionamiento de unas defensas que sirvan de protección al puente para el impacto de barcos mayores, en concreto se ha estudiado el impacto de la goleta Atyla. Este ejercicio se hace a modo orientativo por si en un futuro se considerasen necesarias. El diseño realizado se puede utilizar como base para el desarrollo y adaptación del mismo a las condiciones que determinen las autoridades competentes.
Las defensas que se proponen pueden ejecutarse en 2 fase, pudiéndose utilizar en una primera fase compuesta por la mitad de los pilotes, como elementos de canalización del tráfico en la ría a su paso por la pasarela.
Las defensas propuestas se disponen en los márgenes del canal de navegación entre las dos pilas centrales, y estarían constituidas por pilas monopilotadas de 1.20 m de diámetro unidas entre sí por tres vigas de hormigón armado dispuestas a distintas alturas.
Este diseño se puede optimizar además si se disponen vigas prefabricadas entre los pilotes y se conectan mediante uniones metálicas, pretensadas en hormigón o mixtas.
Tomado de www.barakaldodgital.com
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